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Crecer en El Impenetrable: la historia de Pablo Cesar Luna

Llegaron las vacaciones de invierno y los prestadores turísticos locales de  El Impenetrable se prepararon para un mes de trabajo intenso y gratificante.

 

La Asociación de Vecinos de La Armonía está formada por familias vecinas al portal de acceso al Parque Nacional El Impenetrable quienes se dedican a ofrecer gastronomía típica del lugar y salidas guiadas a los visitantes que van llegando a este incipiente destino de turismo de naturaleza. Pablo Cesar Luna es uno de ellos.

 

Pablo nació en el Paraje La Armonía hace 28 años dentro de una familia dedicada a las labores del campo. Luego de terminar la escuela secundaria, tuvo varios trabajos temporales en la zona, pero ninguno le aseguraba una estabilidad a largo plazo y por ello decidió dejar La Armonía para probar suerte en Buenos Aires. La gran ciudad no dejó a gusto a Cesar  y a los pocos meses volvió a su lugar de origen que tanto extrañaba.

A partir del año 2020, el programa Emprendedores por Naturaleza inició un ciclo de talleres y capacitaciones sobre guiadas interpretativas en kayak, senderismo y bicicletas. Pablo fue uno de los primeros en asistir a las jornadas. A medida que fue adquiriendo herramientas y comenzaron a llegar más turistas al paraje, fue tomando confianza como guía de kayak. 

 

Para dar un mejor servicio tomó el hábito de llevar consigo guías de aves y así poder mostrarle a sus clientes la diversidad de especies que pueden avistarse en sus recorridos por el río Bermejito, el límite sur del Parque Nacional. Los turistas que tienen la posibilidad de ser guiados por Pablo suelen felicitarlo por su calidez y el buen servicio que brinda: es un guía muy respetuoso con los silencios de los pasajeros e invita naturalmente a disfrutar y observar la naturaleza del lugar.

 

“Todo lo que estamos viviendo aquí me permite trabajar por primera vez como guía de sitio, mostrar y compartir lo que conozco de nuestra flora y fauna con los visitantes. Esa oportunidad ha hecho que todo sea diferente para mí, porque yo puedo crecer económicamente sin tener que irme del lugar donde nací, crecí y quiero seguir viviendo» Pablo Cesar Luna.

 

Pablo, al igual que otros vecinos locales, apuestan y eligen permanecer en su lugar de nacimiento, compartiendo saberes y costumbres a quienes visitan El Impenetrable.